Sin tí...

- No, no quiero que vuelvas.

- Si no te importa creo que lo haré.

- Que no entiendes? Me canse de esperarte cada mañana acostada en mi cama.

- Prometo que volveré, esta vez espérame. Siempre vuelvo.

- Sabes que lo haré. Sabes que te esperaré con mis caderas hundidas entre las sábanas. Sabes perfectamente que mi mente dirá que no por un segundo y mis ojos intentarán olvidarte, pero mis manos solo desearán acariciarte. Si sabes, porque me sigues torturando?

- Me gusta saber que haga lo que haga siempre estarás ahí.

- No siempre, el día que muera por tu sed, tus ríos se secarán por enseñarme tus aguas envenenadas que no me diste a beber.

- Mujer, me estas amenazando?

- No, solo te digo lo que va a suceder. Te ayudo a comprender que no siempre estaré… que tu a veces no estás y que cuando regresas te vas igual. Qué llegará el día qué uno de los dos no estaremos y lo que perdimos por esperar, por hacer lo conveniente y lo que hay que hacer… tu y yo perdimos una vida.

- No haces más que decir tonterías. Somos adultos y tenemos responsabilidades.

- Digo verdades que están escondidas en el mundo del adulto responsable que ayudan a olvidar los verdaderos deseos y anhelos entre absurdas reglas establecidas para hacernos fuertes cuando lo que se consigue con eso… cariño… es solo, tan solo escondernos.

- Mujeres tontas… que creéis aún en príncipes azules y sueños estúpidos que se rigen por vuestro corazón cegándoos ante la realidad.

- Sueños tal vez imposibles, sí… príncipes que seguramente no existan… pero tu te levantas cada mañana con un arma en la mano y yo con una flor.

- Sin esta arma querida mía nunca conseguiría lo que anhelo, mis deseos. Y tu que llevas, una flor? Que poder te da eso? Qué consigues con eso?

- De momento que te fijes en ella y lo absurda que te parece. Mientras te distraigo con ella, nadie muere.

- Pero que tonta eres… perderé contigo el tiempo que yo quiera, no te das cuenta? Con mi arma puedo doblegar en segundos ideas, personas!!

- Con mi flor no doblego, respeto. Que te llena tanto que a la fuerza ganas? Doblegas, intimidas y matas… consigues tus objetivos tal vez, pero como? Asustando, matando… que inteligencia encierra eso? Si no la mayor barbarie.

- Pero consigo dinero, tierras, poder!

- Poder? El poder lo tendrás cuando con una flor en la mano y unas palabras consigas que las personas admiren sus propios sueños moldeados a base de canciones. Acércate y huele esta flor.

- Déjame!

- Acércate, ven… no tienes nada que temer… tan solo dime que sientes.

- He dicho que me dejes!. No te lo diré otra vez.

- Ven… huele y mira mi sincera sonrisa… no temas la verdad de lo que has hecho hasta ahora. - No encierres en lo más profundo tus lamentos… porque sé que no estás contento con todo lo que has hecho… debe haber para ti un resquicio de esperanza… ven…

- No te repetiré de nuevo que lo dejes ya.

- Que harás si no lo hago?

- Sabes lo que haré Paz.

- No sé qué harás Guerra.

- Te mataré.

- Si lo haces, ya no serás nadie sin mí.

- Si lo hago tal vez muramos los dos y así termine nuestra agonía.

- Si lo hacemos la humanidad ya no tendrá excusas por las que luchar. Sin Guerra no hay Paz.

- Sin Paz no hay Guerra.

- Sin ti no tengo sueños de esperanza.

- Sin ti no tengo ídolos contra los que luchar.

- Vámonos.

- A donde loca?

- Donde no nos puedan encontrar.

- Quienes?

- La humanidad.

- No podremos huir de ellos jamás.

- No sé si podremos… ni si lo lograremos…

- Si alguien nos lo impide lo mataré!

- No! Eso es lo que no quiero.

- Porque? Yo estoy hecho para matar.

- Y yo para amar. Tira tu arma y yo tiraré mi flor… dame tu mano.

- Y convertirme en paloma? Será mejor que me vaya.

- Sí… te seguiré esperando como todas las mañanas…